EL AMOR DE MUCHOS SE ENFRIARÁ:
En los terribles
tiempos en los que nos ha tocado vivir, las oportunidades para que nuestra
fe sea puesta a prueba no faltan... es más, me animo a asegurar
que "sobran". Hace escasas horas del atroz ataque perpetrado
contra las torres gemelas en Estados Unidos de Norteamérica y aún no puedo salir
del asombro y estupor. El solo hecho de haber visto cómo se producían
los sucesos "en vivo y en directo" me hacía estremecer
y decididamente coincidirás conmigo que la vida ya no será
igual después de haber visto tales cosas.
Desde el
primer instante en que supe lo que estaba sucediendo me uní a los
millones de hermanos que alrededor del mundo clamamos a Dios por Su presencia,
misericordia y protección. Y debo confesarte que al principio no
sabía exactamente por qué orar primero. Eran tantos los
pensamientos que me asaltaban que no podía detener mi mente...
pensaba y clamaba por los inocentes, los niños, las familias desechas.
Después llegó el turno de orar por los atacantes, aquellos
que despreciando el altísimo valor de una vida humana se lanzaron
a la locura de terminar no solo con la propia sino con las de miles de
seres humanos más... todos inocentes... personas comunes como tu
y yo... trabajando, haciendo trámites o sencillamente paseando,
disfrutando de unas merecidas vacaciones.
Podrán
esgrimir mil razones y no habrá una sola que valga la vida de un
solo ser humano, ni siquiera la vida del piloto que produjo tamaño
desastre. Mi Dios, nuestro Dios, el Único Dios Vivo y Verdadero
es TODO AMOR.
Así que debe de entenderse muy bien que alguien que
pretenda justificar tal atrocidad en el nombre de su dios, un dios que
reclama sangre humana para aplacar su sed, sin dudas no es nuestro Dios,
que lejos de pedir sangre pide "sacrificio de alabanza, de amor...":
Hebreos 13:14 (RVA) Porque aquí no tenemos
una ciudad permanente, sino que buscamos la que ha de venir.
15 Así que, por medio de él (Jesucristo), ofrezcamos siempre
a Dios sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan
su nombre.
16 No os olvidéis de hacer el bien y de compartir lo que tenéis,
porque tales sacrificios agradan a Dios.
Hermano querido,
las palabras no alcanzan a expresar el peso que hay dentro de mi corazón,
seguramente el mismo que sientes tu. Tan solo agregaré lo que Dios
puso en mi corazón para este mensaje. Dios me hizo ver que siendo
todo amor, jamás obligará a ninguna persona a aceptar Su
voluntad como la Única y Perfecta Voluntad del Único Dios
Verdadero.
Así es como el dios de este mundo, Satanás, aún
anda suelto y rugiendo alrededor de cada persona, para devorarla despiadadamente
como hemos podido ver una vez más. Y no se detendrá hasta
que nuestro Señor vuelva.
Debo ser sincero contigo. Dios me lo ordena.
Debes recordar que la
maldad de este mundo, lejos de terminar, irá en aumento con el
pasar del tiempo. Crecerá hasta hacer imposible la vida tal como
la concebimos hoy en día y así llegará el "día
final"; glorioso para nosotros los hijos de Dios y terriblemente
oscuro para todos aquellos que no aceptaron a Jesús como su Señor.
Y a medida que escuchaba la suave voz del Señor Jesús, mi
corazón se fortalecía en fe a la vez que tomaba conciencia
de la tremenda magnitud de la batalla que libramos cada día de
nuestras vidas.
Así es como entre muchísimas cosas más,
nuestro Dios mi hizo detener en este pasaje bíblico que te comparto:
Mateo 24:11 (RVA) Muchos falsos profetas se levantarán
y engañarán a muchos;
12 y por haberse multiplicado la maldad, se enfriará el amor de
muchos.
13 Pero el que persevere hasta el fin será salvo.
14 Y este evangelio del reino será predicado en todo el mundo para
testimonio a todas las razas, y luego vendrá el fin.
Hermano amado,
te suplico que tomes con mucho respeto esto que te comparto, pues no es
mi voluntad hablarte de estas cosas, sino orden expresa de nuestro Señor.
Él me ha hecho razonar (y el mismo planteo te hago):
Has visto
lo que sucede en este mundo pasajero, has prestado atención a lo
que Satanás y sus seguidores hacen a mis hijitos amados?... pues
ahora con más fuerzas te digo hijo querido, levántate en
tu fe, ponte de pie y comprueba que tu fe es verdadera. Estas viendo con
tus propios ojos que la maldad del mundo se multiplica día tras
día... tu eres mi testigo de que lo que anticipé hace ya
2000 años se cumple y se cumplirá sin que nada falte.
Y
ahora quiero que mires a tu corazón y me respondas con sinceridad
a esta pregunta que hoy te hago:
¿Se enfriará el amor de fuego que puse en tu corazón?
¿Permitirás que tus circunstancias condicionen nuestra relación
de amor?
¿Mi presencia en tu vida depende de tus circunstancias o exclusivamente
de Mi?
¿Creerás tu también (como muchos hoy) que Yo también
soy responsable de estas atrocidades?
¿Me inculparás a Mi?
Créeme
hermano de mi corazón, que a medida que sentía al Señor
hablarme en este modo, mi ser se estremecía y pude sentir en lo
más profundo, todo el dolor que Dios está experimentando
ante el sufrimiento que Su creación toda está padeciendo.
Y Dios bien lo conoce, pues nos los anticipó también desde
hace 2000 años cuando dijo:
Romanos 8:22 (RVA) Porque sabemos que toda la creación
gime a una, y a una sufre dolores de parto hasta ahora.
23 Y no sólo la creación, sino también nosotros,
que tenemos las primicias del Espíritu, gemimos dentro de nosotros
mismos, aguardando la adopción como hijos, la redención
de nuestro cuerpo.
Pero algo
tenemos por seguro: DIOS ES EL VICTORIOSO. Y Su promesa es FIEL Y VERDADERA.
Él prometió:
Apocalipsis 21:3 (RVA) Oí una gran voz que
procedía del trono diciendo: "He aquí el tabernáculo
de Dios está con los hombres, y él habitará con ellos;
y ellos serán su pueblo y Dios mismo estará con ellos como
su Dios.
4 Y Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos. No
habrá más muerte, ni habrá más llanto, ni
clamor, ni dolor; porque las primeras cosas ya pasaron."
5 El que estaba sentado en el trono dijo: "He aquí yo hago
nuevas todas las cosas." Y dijo: "Escribe, porque estas palabras
son fieles y verdaderas."
6 Me dijo también: "¡Está hecho! Yo soy el Alfa
y la Omega, el principio y el fin. Al que tenga sed, yo le daré
gratuitamente de la fuente de agua de vida.
7 El que venza heredará estas cosas; y yo seré su Dios,
y él será mi hijo.
Hermano querido,
hermana amada en Cristo Jesús, se que estamos unidos por el mismo
Espíritu Santo de Dios, así que no hace falta que te diga
que me uno contigo en oración por los hermanos que hoy padecen
este terrible dolor.
Tan solo te digo que te abrazo con todo mi corazón,
te estrecho fuertemente y así, simbólicamente unidos en
genuina hermandad cristiana, te invito a que nos arrodillemos ante el
trono de gracia de Dios y sigamos clamando hoy, mañana, pasado
mañana y cada uno del resto de nuestros días en esta tierra
hasta la gloriosa segunda venida de nuestro Rey y Señor Jesucristo,
a Quien sea toda la gloria, honra y honor por los siglos de los siglos.
Amén.
En su servicio, Daniel Liandro.
En todo tiempo ama el amigo,
Y es como un hermano en tiempo de angustia.
(Provervios 17:17)