SERIE "NO ES FÁCIL"
DESCUBRIR EL LADO BUENO DE LAS COSAS - Parte 2/5
Amigo, hoy vamos a desenmascarar a nuestro
adversario el Diablo.
Así que prepárate para enfrentarte con situaciones
de tu propia vida que rara vez deseas revisar. Es necesario que lo
hagas ya mismo, por tu "salud espiritual".
Quiero comenzar dejándote este espacio inicial
para que vuelques aquí tu problema o dificultad. Esa o esas situaciones
con las que te enfrentas en este mismo momento y tanto dolor te están
significando. Por supuesto, yo podría escribirte acerca de cientos
de casos "injustos" de "muertes sin sentido aparente", traiciones, engaños,
desilusiones, violaciones, abusos de todo tipo, etc. etc.
Si embargo, prefiero que pienses ahora en tu situación actual y traigas
a tu "mente consciente" esa o esas dificultades que te están
molestando. ¿Ya lo has hecho? ¿Tienes en claro cuál es tu problema?
Bien, te aclaro que no pretendo que te duela más de lo que en sí ya
es, sino que lo tengas bien presente cuando leas este trabajo.
Te aliento en el amor de Dios a que no desmayes y te esfuerces hasta
el final. Dios siempre nos tiene un final "sorpresa". Y
te confieso que esto lo proclamo por fe, dado que ni yo mismo en este
preciso instante alcanzo a medir qué es lo que el Espíritu Santo terminará
haciendo contigo (y conmigo) a través de este estudio. Dios te bendiga
amigo !!!
Uno de los motivos que como cristianos puede
resultar en "frustración" es saber:
- Que nuestro amoroso Dios creó todo el universo
con el poder de Su palabra;
- Que tiene toda autoridad,
- Y todo entendimiento;
- Que Es Amor y
- Que podría rescatarte, sanarte, salvarte,
librarte, etc.;
pero ¿porqué no lo hace?
Si has experimentado esta sensación de abandono,
cuando parece que Dios no escucha tus oraciones, que no se manifiesta,
que no te defiende como tu esperabas, en definitiva que no se ocupa
de tu vida; bien sabrás que es una horrible experiencia, máxime si
vives cada día arraigado en los principios cristianos.
CUIDADO: estos
estados de ánimo son "caldo de cultivo" (una oportunidad
única) para que el gran acusador que enfrentamos (satanás) vuelva
al ataque con su conocido "caballito de batalla": "Dios
no está contigo. Estás absolutamente solo. Él te mintió y ahora puedes
comprobarlo por ti mismo".
NO LE CREAS, pues:
Juan 8:44 (RVA) ...el diablo... Cuando habla mentira, de lo suyo propio
habla, porque es mentiroso y padre de mentira.
Analicemos qué es lo que está sucediendo, para
tratar de descubrir y comprender cuál es la voluntad de Dios para
tu vida. Bien puedes estar diciéndote en este instante:
"Si Dios es Todopoderoso, y todo lo sabe, ¿porqué
deja que algo así me suceda?". Y no creas que eres
el único que piensa así. Debo expresarte que lamentablemente muchos
cristianos creen la misma mentira satánica.
Aceptar a Jesús como Señor es algo tan indispensable
como respirar. ¿Porqué? Sencillamente porque si no "TE MUERES".
Pero mucho cuidado, que este aceptar a Jesús como tu Señor no implica
"necesariamente" que a partir de ese instante dejes de sufrir
distintas adversidades en tu vida (como si te envolviese una "burbuja
espiritual" y pudieras pasar por esta vida sin más contacto con
la maldad que gobierna el mundo).
Cuidado con esta idea, a la que
yo llamo el "evangelio de las ofertas": "tu me das
tu vida y yo la convierto en un lecho de rosas sin espinas" (Dios
no dice esto en la Biblia). A juzgar por la cantidad de testimonios
bíblicos y de otros hermanos en todo el mundo, antes y hoy, bien parece
que se cumple perfectamente lo que nuestro Señor anunció:
Juan 16:33 (RVA) Os he hablado de estas cosas para que en mí tengáis
paz. En el mundo tendréis aflicción, pero ¡tened valor; yo he vencido
al mundo!
En el mundo en que vivimos, tenemos muchísimos
ejemplos de personas que "cuando las circunstancias justificaban"
sus actos de heroísmo, no dudaban un instante en entregar hasta su
vida. Creo que todos los países del mundo tienen en su historia un
"mártir" que entregó su vida por la patria. En Argentina
recordamos al sargento Cabral, quien para salvar la vida del General
José de San Martín, se interpuso entre el caído general y la bayoneta
del enemigo. Y el "folclore" patriótico le atribuye el haber
dicho mientras agonizaba: "Muero contento, hemos batido al enemigo".
Ahora bien, ¿qué nos ocurre a nosotros, los
"cristianos", que teniendo como dueño y Señor al Dios Todopoderoso,
vemos ante nuestros propios ojos y hasta padecemos en nuestra propia
vida los actos más atroces y las injusticias más severas y llegamos
a sentirnos desamparados?
Si como cristianos llegamos a sentirnos
confundidos y desilusionados, permitiendo que este sentimiento impacte
sobre nuestra fe, sin duda el resultado será el desconsuelo. La ausencia
de significado es lo que hace que la situación que enfrentamos se
convierta en intolerable. Al encontrarnos en esta condición, la depresión
causada por cualquier circunstancia adversa realmente puede ser más
intensa que la experimentada por una persona que aún no conoce a nuestro
Jesús, y que por lo tanto, ni espera ni recibe nada.
Nuestra mayor
dificultad a vencer es que "sabiendo que tenemos un Dios Padre
Todopoderoso que no tiene límites y todo lo sabe, aceptemos Su voluntad
y confiemos en Él aún cuando lo que Él está haciendo no tenga a nuestro
entender "limitado" ningún sentido aparente".
Lo cierto es que en el mundo tendremos aflicción,
pero si has aceptado a Jesús como tu Señor bien puedes proclamar que
gracias a Su victoria sobre este mundo, tienes la libertad que Cristo
te regala. Gloria a Dios!!!
Mira amigo, creo firmemente que la mayoría
de las personas (por no decir todas, cristianas o no) tarde o temprano
experimentarán esa sensación de "abandono" o "alejamiento"
de Dios; dado que en algún momento de la vida se nos presentarán situaciones
que escaparán totalmente a nuestra capacidad de comprensión, y nuestra
mente "finita" (limitada) no podrá ver más allá que el propio
dolor, pudiendo arribar a conclusiones fatales como: "Dios no
me escucha ni responde mis oraciones, debe estar ofendido conmigo,
o tal vez me odie"; o "soy tan pecador que ha perdido Su
interés en mi"; etc. etc.
Todo este conjunto de ideas no es más
que una "ilusión", pero sus consecuencias sobre nuestra
salud espiritual y mental pueden ser catastróficamente reales. Lo
que más llama la atención de esto que compartimos, es que no es solamente
el dolor y el sufrimiento lo que causa el mayor daño; sino que existe
un factor que generalmente pasa inadvertido: LA CONFUSIÓN. Y hay de
tener mucho cuidado, pues atenta directamente contra la fe, pues siendo
la fe la "certeza de lo que se espera y la convicción de lo que
no se ve"; ¿cómo puede alguien que está confundido experimentar
"certeza y convicción"?. De lo único que puede estar seguro
y convencido es que está confundido; y nada más.
La palabra clave aquí es: EXPECTATIVA.
¿Cuáles son tus expectativas con relación a Dios?
¿Cuáles son tus expectativas con relación a la vida que estás viviendo?
Son ellas las que preparan el camino para que suframos una desilusión.
No existe una angustia mayor que la que una persona experimenta cuando
ha edificado todo su estilo de vida sobre cierto fundamento y que
luego éste se derrumbe en un momento de tensión y dolor extraordinarios.
Una persona en esta situación, se enfrenta con una crisis que ha sacudido
sus bases, aquello que le servía como punto de apoyo de su vida.
Si esa persona es cristiana, podrá pensar
que el Dios a quién ha amado, adorado y servido parece ahora estar
callado, distante, indiferente y despreocupado; justamente cuando
atraviesa el momento de mayor necesidad de su existencia. La pregunta
clave es: ¿vienen momentos así para los creyentes "fieles"?
La respuesta es SÍ, vienen.
Por esto es que te decía que un tema importante
son tus "expectativas". Lo que esperas de Dios. Y si lo
que Dios hace no "encaja" con aquello que estabas esperando
de Él, puedes caer en el terrible error de hacerte la "fatal
pregunta": ¿Porqué?
El hombre, desde los principios del tiempo
ha estado buscando permanentemente respuestas a sus muchos porqués.
En lo referente a las decisiones soberanas de Dios esta pregunta no
tiene ningún sentido ni valor; ya que el Señor nunca se apresura en
contar lo que está haciendo. Y creo que si lo hiciera, en la mayoría
de los casos tampoco entenderíamos Su proceder; así que ¿porqué esperar
explicaciones?
Y aquí está el centro de este
estudio:
¿Quién es Dios en tu vida:
el "Dios Todopoderoso",
Creador del universo y de tu existencia;
o "tu mismo"?
Amigo, disculpa por favor la dureza de mis
palabras, pero cuando un desconocimiento de Dios puede costarte tu
vida, he aprendido a decir las verdades del Señor a cualquier precio.
Aún a costa de que no quieras seguir leyendo, o desprecies mi amistad.
Sin embargo, como todo lo que hago o digo lo hago para nuestro Señor,
no te sientas obligado ni creas que en modo alguno puedes lastimarme.
En todo caso, a quien lastimas y desprecias es a Quien se dejó morir
por ti en una cruz: JESÚS. Piénsalo.
En este punto de nuestro trabajo es donde
el Espíritu Santo de Dios te invita a dialogar íntimamente con él.
Te propone el tema sobre el que conversarán y te espera pacientemente.
Yo me estoy despidiendo de ti ahora, pues el Señor continuará hablando
a tu corazón.
No le falles, no "contristes al Espíritu",
acepta Su invitación y déjale enseñarte las verdades de Dios. Que
el Padre Celestial bendiga tu vida.
Aquí te dejo el tema que Dios te propone para conversar:
- Exodo 3:14 (RVA) Dios dijo
a Moisés: --YO SOY EL QUE SOY.
- Deuteronomio 29:29 (RVA)
"Las cosas secretas pertenecen a Jehovah nuestro Dios, ...
- Job 41:11 (RVA) Dijo Dios:
¿Quién me ha dado primero para que yo le restituya? ¡Todo lo que
hay debajo del cielo, mío es!
- Eclesiastés 11:5 (RVA)
Como tú no comprendes cómo entra el espíritu a los huesos en el
vientre de la mujer encinta, así no comprenderás la obra de Dios,
quien hace todas las cosas.
- Isaías 45:22 (RVA) "¡Mirad
a mí y sed salvos, todos los confines de la tierra! Porque yo soy
Dios, y no hay otro.
- Isaías 55:8 (RVA) "Porque
mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos
son mis caminos, dice Jehovah.
9 Como son más altos los cielos que la tierra, así mis caminos son
más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más altos que
vuestros pensamientos.
En definitiva, la pregunta es la misma:
¿Quién es tu Dios?
¿Quién dirige los destinos de tu vida?
Y finalmente una reflexión más:
Eclesiastés 3:1 (RVA) Todo tiene su tiempo,
y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora:
2 Tiempo de nacer {Lit., dar a luz} y tiempo de morir;
tiempo de plantar y tiempo de arrancar lo plantado;
3 tiempo de matar y tiempo de sanar;
tiempo de destruir y tiempo de construir;
4 tiempo de llorar y tiempo de reír;
tiempo de estar de duelo y tiempo de bailar;
5 tiempo de esparcir piedras y tiempo de juntar piedras;
tiempo de abrazar y tiempo de dejar de abrazar;
6 tiempo de buscar y tiempo de perder;
tiempo de guardar y tiempo de arrojar;
7 tiempo de romper y tiempo de coser;
tiempo de callar y tiempo de hablar;
8 tiempo de amar y tiempo de aborrecer;
tiempo de guerra y tiempo de paz.
9 ¿Qué provecho saca el que hace algo, de aquello en que se afana?
Amigo, ¿en qué tiempo de tu vida te encuentras?
Sea cual fuese, Jesús te invita a descansar en Él.
Mateo 11:28 (RVA) Venid a mí, todos los que estáis fatigados
y cargados, y yo os haré descansar.
- ¿Estás enfermo?: descansa en Él.
- ¿Sufres algún mal?: descansa en Él.
- ¿Te han ofendido?: descansa en Él.
- ¿Ha partido un ser querido?: descansa en
Él.
- ¿No tienes trabajo?: descansa en Él.
- ¿Crees que tu error es tan grave que no
tiene perdón?: sigue descansando en Él.
Hebr 4:15 (RVA) Porque
no tenemos un sumo sacerdote que no puede compadecerse de nuestras
debilidades, pues él (Cristo) fue tentado en todo igual que nosotros,
pero sin pecado.
Nuestro Señor puede compadecerse de nuestras
debilidades, pues fue tentado en todo igual que nosotros. La gran
diferencia fue que no se equivocó. Cumplió fielmente todo lo que nuestro
Padre Celestial le encomendó. Por esto podemos confiar en Él. Por
esto es tan fácil amarlo: ÉL NOS AMO PRIMERO !!!
GLORIA A DIOS !!!
Te dejo en la compañía del Espíritu Santo.
Ruego a Dios por ti y por mi. Hasta la próxima. Continuará ...
En su servicio, Daniel Liandro.
En todo tiempo ama el amigo,
Y es como un hermano en tiempo de angustia.
(Provervios 17:17)