SERIE "HOLA PAPÁ": Un estudio sobre la ORACIÓN.
CAPÍTULO 2/7:
¿Porqué orar?
En la oración encontramos dos seres fluyendo en un mismo Espíritu, dialogando, escuchándose recíprocamente, intercambiando opiniones. Dios en primer lugar y luego el hombre como Su creación.
Dios enseñando, amando, corrigiendo, guiando, fortaleciendo, sosteniendo, iluminando, etc. etc. y el hombre aprendiendo, escuchando, pidiendo, agradeciendo, alabando, etc. etc.
Sabemos que DIOS tiene conocimiento individual de cada uno de nosotros, y que le interesa cómo vivimos y cómo nos desenvolvemos en el diario vivir.
Recordemos:
Efesios. 4:7 (A cada uno fue dada la gracia)
1 Corintios 7:17 (Como DIOS llamó a cada uno)
Mateo 10:30 (Todos nuestros cabellos están contados)
DIOS no es un DIOS de masas sino un buen Padre Celestial absolutamente comprometido con tu vida y la mía.
Por lo tanto, DIOS, conociéndonos tanto, sabe y conoce también todas nuestras necesidades. Veamos:
Mateo 6:8 (RVA) Por tanto, no os hagáis semejantes a ellos, porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad antes que vosotros le pidáis.
Ahora sabemos por información de la misma Palabra de DIOS que no solo conoce individualmente nuestras necesidades, sino que lo sabe antes que le pidamos.
Sabemos que:
1.- DIOS es amor (1 Jn. 4:8),
2.- DIOS es fiel (1 Co.1:9),
3.- DIOS es luz y no hay ningunas tinieblas en EL (1. Jn. 1:5),
4.- DIOS es Todopoderoso (2 Co. 9:8),
5.- Padre de misericordia y consolación (2 Co.1:3),
6.- nos ha adoptado como hijos (Gal. 4:5),
7.- nos ha hecho coherederos con Cristo ( Ro. 8:17),
8.- nos ha hecho por su sola gracia aptos para la vida eterna (Ef. 2:5),
9.- Somos hechura suya (Poiema=Obra Maestra) (Ef. 2:10);
10.- Sabe que tenemos necesidades (Mt. 6:32) y por si todo esto fuera poco:
11.- No solo conoce nuestras necesidades sino que lo sabe anticipadamente.
Como también sabemos por revelación de la Biblia que Dios es Fiel y ha proclamado que jamás nos dejará ni desamparará, entonces Dios no puede dejar de suplir nuestras necesidades, tiene la obligación de hacerlo pues así lo ha prometido.
Entonces:
- ¿por qué orar?
- ¿qué necesidad tengo de dedicar el valioso tiempo de mi vida a la oración?
Este razonamiento es muy común, pero no por ello tiene que ser verdadero, pues olvida un condicionante que Dios ha establecido: QUE OREMOS.
Lucas 11:9 Y yo os digo: Pedid, y se os dará; buscad y hallaréis; llamad, y se os abrirá.
Juan 15:7 Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que queráis, y os será hecho.
Juan 16:24 Hasta ahora no habéis pedido nada en mi nombre. Pedid y recibiréis, para que vuestro gozo sea completo.
JAMAS la Palabra de Dios nos indica quedarnos cruzados de brazos aguardando PASIVAMENTE que DIOS haga TODO por nosotros.
DIOS ES INMUTABLE:
Isaias 46:4 (RVA) Hasta vuestra vejez yo seré el mismo, y hasta las canas yo os sostendré. Yo lo he hecho así, y os seguiré llevando. Yo os sostendré y os libraré.
Conforme a este versículo bíblico podemos ver otra faceta de la invariabilidad de nuestro Padre Celestial. Pero veíamos recién que para recibir es "necesario" pedir. Dios mismo dispuso que nosotros haciendo uso del la libertad de decisión con la que nos honró, exterioricemos hacia EL nuestra sincera voluntad, los pensamientos de nuestro corazón.
Como hijo de Dios, muchas veces en momentos de oración fui bendecido por Papá con discernimiento y sabiduría, y a la par que pedía recibía del Padre todo lo necesario para comprender lo que me pasaba y cómo enfrentarlo. Creo profundamente que la oración es el medio eficaz que Dios diseñó para que hagamos contacto directo con Él, pues como buen Padre anhela oírnos y mantener comunión con cada uno de nosotros en forma individual.
Pero recuerda que ese mismo Padre de amor que compartimos jamás forzará tu libre voluntad. Tu debes decidir hablar o no con Él. Y Él no dejará de amarte sea cual fuere tu decisión. Recuerda que Él es perfecto y nunca cambia. Nosotros somos los que no podemos mantenernos firmes en una línea.
El libre albedrío es una de las leyes que más dignifica a nuestro DIOS y que lo muestra en su maravillosa grandeza. ¡Hubiera sido tan fácil para nuestro Padre crearnos con la obligación de serles fieles en todo, de amarlo incondicionalmente, sea cual fuere la circunstancia por la que atravesemos!
Sin embargo, ¡¡¡ DIOS quiso, quiere y querrá hijos que lo amen !!! Y que ese amor sea verdadero, libre y de todo corazón.
Roma 12:9 (RVA) El amor sea sin fingimiento, aborreciendo lo malo y adhiriéndoos a lo bueno.
No olvidemos que este amor de nuestra parte es una actitud de vida y no un sentimiento. Si fuera así, lo que sentimos por Dios se vería siempre condicionado según estemos de ánimo, y así será cómo manifestemos a Dios nuestro amor:
1. Un buen día = Amor pleno con Dios;
2. un día regular = nuestro amor decae;
3. un mal día = ¿qué Dios?.
Por lo tanto, inmediatamente después de haber creado al hombre, DIOS mismo le brindó la plena libertad de decisión.
Desde ese mismo momento el hombre pudo elegir (tal como hoy en día lo hacemos), entre vivir a través de los sentidos y confiado solamente en lo que ve, o contar con la invalorable guía de DIOS en cada cosa que emprenda.
Personalmente ante la disyuntiva prefiero caminar por la vida sabiendo que DIOS es mi suficiencia (2 Cor. 3:5) y que CRISTO me fortalece (Fil. 4:13).-
No dejemos de advertir que:
“DIOS no solo nos ha dado la vida, sino que nos honró concediéndonos la libertad absoluta de elegir cómo vivirla”.
¿Cuál es tu elección? Vivir o no con Dios.
Ser tu mismo el Señor de tu vida o dejar a Dios reinar sobre ti como solo Él sabe, puede y debe hacerlo.
Y partiendo de la base de que ya lo has aceptado como tu Señor, como el Dueño de tu vida, no te queda más alternativa que conocer Su perfecta voluntad para poder hacer tuyo todo lo que Dios ya ha dispuesto para tu vida en bendición. Y aquí es donde debemos recordar que nos ha dicho:
1Tesalonicenses 5:17 (RVA) Orad sin cesar.
A medida que avanzamos nos vamos dando cuenta que la oración tiene un lugar preponderante para DIOS. Pues claro que sí, si EL mismo la ha diseñado para que tengamos comunicación directa con EL. Por eso es muy importante ENTENDER CORRECTAMENTE qué es la oración y cómo emplearla.
En su servicio, Daniel Liandro.
En todo tiempo ama el amigo,
Y es como un hermano en tiempo de angustia.
(Provervios 17:17)